Variedad Índica

¿Qué conocemos por marihuana Índica?

Las variedades índicas se originaron en climas más fríos y montañosos (pienae en Afganistán y el norte de la India). Las plantas índicas tienden a ser bajas, rechonchas y tupidas. Las hojas indicas son regordetas y el follaje es denso. Se trata de plantas adaptadas a entornos hostiles como las que se encuentran en la cordillera del Hindu Kush. Las plantas índica también son excelentes productoras de hachís, y eso no es casualidad. Sin duda, fueron criadas de esa manera, ya que el hachís es el método preferido de consumo de cannabis en gran parte de la zona de la que proceden.

Las plantas índica no pierden tiempo durante la floración; lo hacen de entre seis a ocho semanas. Es casi seguro que esto se deba a su programación genética nacida de la montaña; quieren producir la genética de la próxima generación antes de que llegue la helada. A los cultivadores de interior les encanta la rapidez con la que las flores índica florecen y se aplanan.

Las índicas son conocidas por su efecto sedante físico. Algunos fumadores usan el nemotécnico, "in da couch", en referencia al conocido efecto corporal de las fuertes cepas índicas que hacen que una persona quiera hundirse en su sofá. Las índicas son ideales para relajarse con una película o música por la noche como una forma de relajarse después de un largo día de trabajo o como un interludio relajante antes de acostarse.

Desde el punto de vista médico, la resina pesada y la potencia soporífera de las flores índica las hace apreciadas por personas con insomnio, ansiedad, náuseas y dolor.

Los efectos recreativos comunes de las cepas índica incluyen una feliz somnolencia, relajación y hambre intensa. Las cepas índicas puras o casi puras incluyen Northern Lights, Hindu Kush, Critical Mass, Purple Kush, L.A. Confidential y God’s Gift.

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